26 de mayo de 2008

No eras sueño

NO ERAS SUEÑO



Yo era tu Dios, tu anhelo.
No sabías mi nombre, no sabía quién eras. No sabías por qué me amabas pero preferías hacerlo…
Pensé que eras sueño, que no podías ser, que todo era pura imaginación. Yo no podía verte… Tú caminabas a mi lado indicándome hacia dónde ir.
En otro momento apareciste y sin más pérdida de tiempo confesaste lo que guardabas… y descubrimos la coincidencia. Un beso selló el instante sagrado.
Desperté, había sido un sueño. Pero el tiempo me dijo que no, que no lo eras. Que eras realidad, que estabas esperándome. Te descubrí tangible, concreto, visible, cercano y mortal. Humano, comprensivo, enamorado y lleno de mí. Incrédula, seguí mis andares.
Otra vez la vida nos encontró… y después de eso, sí me convencí, AMOR… tú no eras sueño. Eras de carne, eras hombre muriendo por mí… Bello destino, éste que nos hemos dibujado. Bella realidad hoy nos toca sentir.

Comentario: En el momento de tenerte frente a frente, algo dentro cambió. En cada nueva ocasión, eso extraño se hizo notable y casi imposible de disimular. Tampoco peleaste por no dar señal. Juntos, perdidos, en silencio enamorados, sin creer en lo que iba sucediendo… caminábamos por el mundo intentando evitar miradas. Intentándolo, pero sin lograrlo. Te había imaginado perfecto, previsible, imposible y deseoso de quererme sin que me diera cuenta. Definitivamente algunas cosas salen al revés, y con exactitud mejor.
Aquí me tienes… sólo para ti. Lista para no dormir por cuidar lo que eres. Colmada de luz para iluminar tu oscuridad. Llena de alegría para envolver tus días. Con paz en las manos para que cierres los ojos tranquilo porque nada empañará tus ilusiones. Viviré para ser serena de tus noches, guardiana de tus castillos, reina de tus conquistas, custodio de lo que ames, soldado contra lo que odies. Recorreré los caminos antes que tú para correr a un costado las piedras que pudieran hacerte caer. Entraré a cada lugar antes de que lo hagas para estar segura de que allí nadie puede lastimarte. Dime qué ansías, puedo empezar a construirlo. Dime a qué temes, puedo derrumbarlo. Puedo conseguir lo que busques y destruir lo que te haga llorar. Puedo darte hasta lo que no tengo, llevarte a volar… ser esa mujer que te llene de amor.


©2008- Todos los derechos reservados

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

¡Gracias por tu mensaje!