Nace un motivo

NACE UN MOTIVO

Nace un motivo más para seguir existiendo
cuando abres tus ojos, que admiran el sol.
Y mientras estiras tus brazos, despidiendo el sueño,
se amplían mis horizontes, amantes de ti.

Como automática, mi mirada te persigue
buscando el secreto, el quid que te guardas.
Pero la respuesta vuelve a ser un enigma,
sólo estás ahí, para hacerme feliz.

Tan precioso como un amanecer,
enderezas tu cuerpo sobre la alfombra,
y a tu buen día me lo sellas con un beso
mucho más revitalizador de lo que pensé.

Te dispones a vestirte, con tu ropa inconfundible,
y envuelves tu piel de fragancia frutal
esa que te hace irresistible para multitudes
pero al mismo tiempo sólo accesible para mí.

Nace una nueva razón para esperarte
cuando te alejas rumbo al trabajo, y me quedo aquí
contando los segundos que faltan para tenerte
de regreso, y escucharte decir que hiciste lo mismo.

Y en cada momento colectivo, tuyo y mío,
nacen mil causas para continuar con la rutina
y caminar cada día con la mutua compañía,
para sentirnos completos, como renaciendo…

Para sentir este amor en carne viva
por años, siglos… porque este amor es adictivo…
Esta pasión nos tiene capturados sin salida,
sin opción de abandonarnos, ni a dejarnos atrás.

No tenemos alternativa, no hay otra posibilidad,
que mantenernos en dúo, esperándonos siempre,
porque así es nuestro amor…
testigo de mil nacimientos de un “Te Quiero”.

©2007- Todos los derechos reservados

Adorada Presencia

ADORADA PRESENCIA

Hombrecito de cristal
no te vayas nunca,
no me dejes sola,
no te despidas, no digas adiós.
Ven y escúchalo una vez más:
“Eres mi adorada presencia”…
Nunca calles tu voz,
Nunca bajes tus brazos,
Nunca silencies tus pasos,
ni opaques tu resplandor.
No acortes tus caminos,
No detengas cada sueño,
No te creas derrotado,
vive siempre con una esperanza.
No me abandones aquí,
no corras hasta donde no pueda verte,
no me supliques que te comprenda
si alguna vez quieres irte.
Levántate y sigue,
la vida continúa, te necesito
aquí a mi lado, con la frente en alto.
No te convenzas de que perdiste,
no supongas que alguien te ganó,
verás, algo podrás aprender,
pero no caigas, hombrecito,
no te arrodilles rendido,
no llores ni te inundes de lamentos.
Ven, toma mi mano,
Seca tus lágrimas y sígueme.
No pienses en alejarte,
ni en buscarte un escondite,
debes continuar,
y no detenerte nunca.
Caminemos juntos,
no me sueltes, no me libres,
no me dejes ir sola,
acompáñame como si fueras sombra,
no te despegues de lo nuestro,
de tantos recuerdos,
de tanta vida compartida.
No te canses de este mundo,
Soñemos con un lugar mejor,
no te quiebres, hombrecito,
porque eres tú mi modelo a seguir.
Ya no puedo verte así,
a punto de perder el aliento,
y con ganas de no luchar más.
Ven y levántate,
aunque sea hazlo por mí,
escucha a tu amiga,
te lo ruego, continúa…
Te lo ruego, no me dejes,
No bajes la vista
no des media vuelta…
Quédate siempre conmigo
hombrecito de cristal
porque bien lo sabes
más Allá también serás
“Mi adorada presencia”…

©2007- Todos los derechos reservados

Tu efecto

TU EFECTO

El cielo está gris,
las nubes tapan las estrellas,
las horas se vuelven monótonas…
Y otra vez me encuentran sin ti.

Si mi vida va por buen camino,
mis ojos todavía no pueden verlo.
Si alguien se cruza en afán de conquistar,
mis oídos lo ignoran, te extrañan a ti.

Tal vez tenga a mi lado a una maravilla,
pero no quiero darme cuenta.
O quizá tenga glorias adheridas a mí,
pero sin ti no me sirven.

Alguien dijo que me veía feliz,
definitivamente debería ser actriz.
Ojala todos mis sueños se hagan realidad,
pero son para ti, si no estás sería inútil.

Creen que la sonrisa me sale fácil,
pero las lágrimas ganan por goleada.
Ellos creen que sin ti puedo seguir…
siguen sin creer que yo sin ti no puedo.

Imaginan que con ellos me alcanza,
pero nunca pensaron que nada es suficiente.
Jamás alguien se puso a pensar
que contigo y nadie más, me basta.

Otros creerán que lo mío es un juego
y tal vez te digan “No la ames nunca”
Cuán poco me conoce esa gente,
por qué no te dirán que sin ti, estoy perdida.

Y si a veces no sé lo qué hago,
Vuelvo a decirlo, estoy perdida.
Tampoco sé cómo has logrado
que sin ti, mi vida esté fuera de foco.

Si supieras cuánto me has cambiado,
porque ahora estoy ciega,
sin ganas de salir a enamorar,
¿para qué? Si eres tú el único objetivo.

¿Alguien te dijo que intenté olvidarte?
Te mintió. Me interpretó mal.
Creyó que yo entregaba mi alma tan fácil.
Se equivocó… se autodenominó crack.

Por qué no te dirá lo que está a mi favor
y qué haces conformándote con eso?.
Sin dudas, tampoco has entendido
que contigo las cosas son distintas.

Este amor que es sólo mío,
aún no te ha ganado.
¿Qué más podría hacer?
Algo, sin ti, suena imposible.

Tampoco he decidido dejarte atrás,
aunque tú lo hayas hecho hace rato.
Pero seguro me recuerdas…
Sin ti, en mí tu imagen sigue sobreviviendo…

Ojala dentro de unos años
por esas casualidades que parecen increíbles
nuestras miradas vuelvan a encontrarse
y sepas que somos como un espejo…

Seguro, Dios nos marcará el camino,
y algo en mi interior me dice
que una de estas noches cada estrella
me encontrará contigo, de la mano…

Y el cielo volverá a ser de color,
las horas despedirán al vacío,
y nuestras vidas, inevitablemente,
cambiarán y resultarán felices.

Todo será culpa de tu efecto,
y de mi causa,
seremos una especie de ley.
Tú y yo, rigiendo en el Amor Universal…

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