SANTO
Lo amo porque es un hombre bueno,
porque tiene un corazón que no le entra en las manos,
y magia en su mirada, y temple en su discurso.
Porque guarda en su memoria el instante del encuentro,
pero sigue su camino porque también tiene fuerza.
Lo amo porque Él nunca me amará,
porque prefiere a su Dios antes que a una tonta mujer,
porque cumple sus promesas,
porque no sabe lastimar...
Lo amo, porque Él nunca lo hará.
Es lo que lo hace magnético,
pero nunca me va a amar.
Mejor así.
Puedo hacerlo sólo yo.
Todos los derechos reservados.
El amor más grande… es ese desinteresado, muy bello poema.
ResponderBorrarSaludos