HISTORIA
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Nuestras galaxias incomprensibles, desordenadas, contradictorias
nos señalan con el dedo sin saber si aún hay motivos para vernos de lejos.
Tuvimos ideas geniales, horribles, otras imposibles, unas pocas realistas,
se escondieron, no se asoman, no nos ayudan a continuar.
La pequeña gran historia duerme pacífica, nadie se anima a despertarla,
crecerá sin preguntarnos que queríamos hacer con ella,
crecerá porque ella quiere, porque ella vive y sí que perteneció.
Nos perderemos sus andanzas, sus travesuras, sus anécdotas,
por no sentarnos y hablar en claro, por no detenernos a decir Te Amo.
Será más grande que cuando la comenzamos,
será más fuerte, invencible, insuperable,
será puro desconcierto,
y un día nos hará pensar a qué tuvimos miedo
cuando era tiempo de soñar despiertos una vida plena y en complicidad.
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